Ficha película

Título:
La Caverna Maldita
Director:
Bruce Hunt
Intérpretes:
Kieran Darcy Smith, Brian Steele, Daniel Dae Kim, Marcel Iures, Lena Headey, Piper Perabo, Eddie Cib
Calificación:
Crítica

Todo el mundo tiene derecho a equivocarse. Pero como decía aquel, los experimentos, es mejor hacerlos con gaseosa, y si uno no está lo suficientemente maduro, mejor no meterse en camisas de once varas. Eso mismo es lo que le ha sucedido al voluntarioso Bruce Hunt, ayudante de dirección de toda la saga Matrix y de la no menos apreciable Dark City, dos auténticos referentes en la ciencia ficción de los últimos tiempos. Pero en este su primer film como realizador, ha cometido todos los errores propios de alguien sin experiencia, y lo que es peor, incapaz de dirigir convenientemente a unos actores ya mediocres de arranque. Para colmo, el argumento del film es prácticamente un calco de otro estrenado el año pasado, Descent dirigido por Neil Marshall –siniestras y malvadas criaturas adaptadas a la oscuridad desde tiempo inmemorial incluidas- con lo que el visionado de la película provoca una gran decepción en todo aquel aficionado al género del terror-suspense, donde se ubica este film de cuestionables resultados.
Una excavación en Rumania descubre una misteriosa iglesia construida sobre una cueva donde hay una gran cantidad de recovecos, pasadizos, e incluso un río y como no podía ser de otra forma, allá irán los espeleólogos buceadores más enrollados del mundo, con sus bronceados músculos de gimnasio, sus sonrisas profidén y su tecnología de última generación para aclarar los enigmas, entre los que están unos voraces y peligrosísimos seres que viven en la oscuridad… Lo peor de la cinta es que el realizador intenta por todos los medios copiar a los grandes referentes del género –en especial a Alien, el 8º pasajero- sin llegar a acercarse ni por asomo a sus niveles de calidad. Además, para hacer más sorprendente y tolerable a todos los públicos su película, las secuencias de acción –aderezadas por banda sonora atronadora, para que saltemos en el asiento- están rodadas de forma que no se vea prácticamente nada, con lo que estamos más de media película metidos en cuevas, sin ver nada y encima con actores malos ¿alguien da más?
Pues si, no contento con eso, el director del film intenta crear un muestrario emocional tipo Gran Hermano entre todos los aventureros que se meten en la cueva, llegando a un ridículo tal que provoca verdadera risa. Ni siquiera las alucinantes secuencias subacuáticas rodadas en impresionantes cuevas naturales consiguen salvar a este film del más completo aburrimiento, que únicamente se ve salpicado, de vez en cuando, por un susto que proviene más de un efecto sonoro que de una evolución de la historia. Lamentablemente, esta caverna no habría sido la elegida por Platón, y ni hay mito, ni un pobre eco de lo que podría haber sido el film.


Federico Casado Reina



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