Ficha película

Título:
Elf
Director:
Jon Favreau
Intérpretes:
Will Ferrer, James Caan, MarySteenburgen, Bob Newhart, Edward Asner, Zooey Deschanel, Daniel Tay, Fa
Calificación:
Crítica

Este es un producto tan obviamente dirigido a una fecha concreta y a un público concreto que no admite discusión alguna: los niños, y la navidad. Para ello nada mejor que un personaje como un elfo –los seres que ayudan a Santa Claus en su “fábrica” de juguetes, en el Polo Norte- que tiene que integrarse en la frenética vida de Nueva York, descubriendo su propia identidad, ya que su origen, en vez de ser “elfico” –habría que ver lo que diría Peter Jackson del personaje, habiendo visto a Liv Tyler o a Orlando Bloom en “El señor de los anillos”, que también interpretan a elfos- resulta ser humano. Lógicamente, el choque transcultural entre la inocencia del elfo y la mezquindad humana va a ser brutal, pero claro, como estamos en Navidad, todo es maravilloso y la gente es más buena, pues… ¿es que no saben como va a terminar la historia?
Claro, todo el mundo lo sabe, pero esa no es la cuestión en este tipo de películas, que ya han campado a sus anchas en la historia del cine –recuerdo una muy parecida, llamada precisamente “Santa Claus, la película”, en la que el elfo protagonista no era otro que el ya desaparecido protagonista de “Arthur, el soltero de oro”, Dudley Moore-. Para esta ocasión se ha tomado a Will Ferrer, una de las últimas “estrellas” del programa televisivo “Saturday Night Live” –del que han salido cómicos como Jim Carrey, Eddie Murphy o Dan Aykroyd- como delirante protagonista del film, que además encierra una parábola demasiado obvia sobre el egoísmo y la mejor forma de combatirlo, según la historia: con una desarmante e inconsciente inocencia. Sin lugar a dudas, el imprevisible carácter del personaje principal –que se pasa media película vestido como un animador de calle de un parque temático dedicado a Papá Noel- es el epicentro de la historia, pero las bromas, las comparaciones entre los dos mundos, resultan demasiado facilotas, demasiado obvias; aunque el guión de Berenbaum –el primero que ha hecho- funciona, hace avanzar la historia e incluso está salpicado de algunos momentos cómicos bien elegidos, el tono general es bastante previsible, incluso para una película infantil, que, no perdamos el norte, en realidad es. Pero la clave de este tipo de películas, es la complicidad original que el público tenga con ella: es decir, ya todos sabemos de que va la historia, y todos sabemos que el enfrentamiento del candoroso personaje protagonista con la brutal jungla urbana va a originar un cúmulo de chistes; entonces, lo importante es hacer que esas “gracias” sean lo más imaginativas posibles. Y el problema es que, aunque hay algunas que lo son –y que resultan desternillantes, como por ejemplo, la forma de comer del personaje, basando todo en el azúcar-, hay otras que son demasiado sencillas. Pero, no nos engañemos, es la película perfecta para las Navidades, porque para eso se ha hecho.


Federico Casado Reina



©2001. AndaluNet, Diseño y hospedaje de páginas Web