Ficha película

Título:
Planta 4ª
Director:
Antonio Mercero
Intérpretes:
Juan José Ballesta, Luis Ángel Priego, Gorka Morena, Alejandro Zafra, Marco Martínez, Marcos Cedillo
Calificación:
Crítica

Antonio Mercero ha demostrado sobradamente que a la hora de manejar los sentimientos del espectador, está más que capacitado. Logró tener a todo el país en vilo con la muerte de “Chanquete”, el rebelde y sabio pescador interpretado por Antonio Ferrandis en la serie “Verano Azul”, y transmitió toda la angustia del surrealismo en uno de sus primeros trabajos, que dio la vuelta al mundo con la cara de José Luis López Vázquez, encerrado en “La cabina”. Pero si bien este mago de los sentimientos parece tener patentado el éxito televisivo –vean toda su trayectoria, con “Farmacia de Guardia”-, en el cine se le resiste, quizás por utilizar recursos demasiado evidentes, demasiado “fáciles”, que puede que en la pequeña pantalla funcionen –dado el carácter eminentemente lúdico de la televisión-, pero que en el celuloide, requieren de algo más de complejidad. Basándose en una obra teatral casi biográfica de Albert Espinosa, Mercero vuelve a los niños –que tan dirige- para contar la estremecedora historia de tres amigos aquejados de una variedad de cáncer óseo, que además tienen que estar postrados en una silla de ruedas. Las relaciones entre los novatos, que llegan a la “cuarta planta” del hospital, y los veteranos, es como asomarse a un trocito del alma humana, con sus mayores grandezas, en el logro de vivir segundo a segundo, e intentando aprovechar por todos los medios la existencia que se les escapa. La prodigiosa y sólida interpretación de Juan José Ballesta, el chaval que saltó a la fama interpretando a “El bola”, es el núcleo central de una película que debería haber tenido una mejor factura –el formato es francamente pobretón, casi peor que una teleserie barata- y una vertebración más elaborada de los recursos dramáticos y humorísticos, para perfilar bien una galería de personajes a los que realmente se les podría haber sacado mucho más partido. Aun así, Mercero consigue emocionar y hacer reír en muchas secuencias, que están llenas de una especial ternura que sólo él sabe manejar sin que llegue a chirriar, máxime tocando una temática tan peliaguda.
Si uno consigue olvidarse de esos pequeños problemas, el film funciona y evoluciona bien en el desarrollo de la historia, sobre todo cuando se bifurca en nuevas subtramas, mostrando el complejo microcosmos de estos verdaderos supervivientes, héroes cotidianos que se reinventan a sí mismos para poder seguir adelante a pesar de todos los problemas, y que también se las apañan para disfrutar de las mismas cosas que otros chavales de su edad, sólo que de una manera diferente, quizás mucho más intensa y verdadera que ese falso mundo de imagen en el que nos enseñan las marcas, los estereotipos y los bares de moda.


Federico Casado Reina



©2001. AndaluNet, Diseño y hospedaje de páginas Web