Ficha película

Título:
Caos
Director:
Coline Serreau
Intérpretes:
Vincent Lindon, Catherine Frot, Rachida Brakni, Line Renaud, Aurélien Wiik, Ivan Franek, Michel Lagu
Calificación:
Crítica

Con sus escasas diez películas, esta directora ha conseguido trazar una lúcida y acertada visión de la sociedad francesa contemporánea, con sus grandezas y miserias, en una poliédrica situación multicultural, empresarialmente tremebunda y orientada a un bienestar económico por encima de todo. Les sucedía a los tres maduros vividores de “Tres solteros y un biberón” –descubriendo la maravilla de la paternidad y subordinando a ésta el clásico egoísmo vital- y también le pasaba al protagonista de “La crisis”, un engreído y próspero ejecutivo al que, en el mismo día, lo dejaba la mujer, lo expulsaban del trabajo y tenía que replantearse toda su escala de valores y vida en general del principio a fin. Esa convulsión que Serreau somete a sus personajes también está presente en este film, lleno de ternura y de una esperanzadora visión de humanidad en un mundo lleno de egoísmo: un atildado y acomodado matrimonio está presente fortuitamente en la paliza que recibe una prostituta magrebí y aunque se marchan espantados ante tal estremecedora situación, la mujer terminará buscando a la chica y la ayudará, cambiando para siempre su vida.
El tono feminista del film se deja entrever de una manera muy acertada, ya que las dos mujeres –cada una dentro de su propio microcosmos- intentan sobrevivir al precio que sea, y utilizando las “armas” que tienen a su alcance; con el correlato anglosajón de “Thelma y Louise”, sólo que mucho mejor matizado por la guionista y directora, se traza una parábola muy inteligente sobre los radicalismos sociales y sexuales, que son irremisiblemente tendentes a fomentar inamovibles puestos y compartimentos estancos en los que deben estar las mujeres y los hombres. El film rompe esos tópicos con soltura y un punto cómico no exento de inteligente ironía en cada secuencia. Sin lugar a dudas, la postura de la directora ha sido la más inteligente a la hora de reivindicar algo, ya que sencillamente mostrando e ironizando sobre ello, se causa un impacto mucho más certero que tomando partido maniqueamente sobre injustas situaciones –que sin duda lo son- de discriminación social y sexual –repito-.
El film también se enmarca varias veces en un tono casi mágico, elemento igualmente recurrente en la filmografía de esta directora, y con una narración ágil y dinámica, logra interesar durante toda la proyección de principio a fin. Otro de los puntos fuertes del film son las interpretaciones del trío protagonista, Vincent Lindon –que ya trabajó con esta realizadora en “La crisis”-, Catherine Frot y sobre todo Rachida Brakni, que consiguió el premio Cesar a la mejor interpretación novel. Una valiente crónica social sobre las desigualdades, subrayada con una entrañable luz de esperanza que prevalece sobre todo el caos que nos rodea y que nos indica que todavía hay sitio dentro de este loco mundo para la voz del corazón.


Federico Casado Reina



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