Ficha película

Título:
El núcleo
Director:
Jon Amiel
Intérpretes:
Aaron Eckhart, Hilary Swank, Delroy Lindo, Stanley Tucci, Tcheky Karyo, Dj Qualls
Calificación:
Crítica

Hace unos años asistimos a una nueva proliferación del cine catastrofista, donde meteoritos amenazaban la faz de la humanidad –“Armageddon”, “Deep Impact”-, volcanes expulsaban ingentes cantidades de magma –“Volcano”, “Dante’s Peak” y para colmo, asistíamos al segundo hundimiento del “Titanic”. El caso es que la fórmula que en los setenta funcionó de maravilla –ahí tienen “La aventura del Poseidón”, “El coloso en llamas”, “Aeropuerto”, “Terremoto” y un larguísimo etcétera- cayó en desuso, pero los grandes estudios estaban ansiosos por revitalizarlo, más que nada por la espectacularidad comercial que conllevaba. Y como ya han explotado hasta el límite todo tipo de desastres naturales o forzados, y ya estamos un poquito hartos de inundaciones, incendios, maremotos, terremotos y hasta invasiones extraterrestres, pues había que rizar el rizo. Cuando ya se creía que estaba todo explotado –nunca mejor dicho…- han recurrido a la tierra misma, al núcleo del planeta, para que la catástrofe sea aún mayor. En esta rocambolesca película, es un grupo de “terranautas” los que tienen que viajar al centro de la tierra para hacer explotar unas cuantas bombas atómicas para que el planeta siga girando sobre su propio eje y no termine la vida en la tierra.
Lo más demencial de un guión absoluta y completamente predecible, es que intenta “justificar” técnicamente todo lo que sucede, que por supuesto, está al servicio de la historia. Por ejemplo: ¿Que está todo perdido y ya parece que se va a terminar la película? Pues resulta que, en un momento de genialidad, a uno de la tripulación se le ocurre una solución tipo “McGuiver” –o sea, poner un chicle en el cable de alta tensión para aislarlo, o algo así- que además, no se le ha ocurrido a nadie en todo el tiempo que han planeado esa expedición para salvar a la humanidad, casi nada, vamos. ¿Que uno es el “malo” de la expedición? Pues nada, hombre, que al final es bueno y salva a toda la humanidad, demostrando que debajo de su aspecto fiero hay un corazón de oro capaz de sacrificarse. ¿Que parece haber un romance entre la “chica” y el “chico” de la película, aunque se pelean muchísimo? Al final… bueno, aunque todo el mundo lo sabe tampoco lo vamos a contar.
Lo que si estamos ya un poco hartos es de contar una y otra vez este tipo de películas, donde la espectacularidad en los efectos visuales suple una galopante falta de imaginación, porque a la postre, este tipo de películas realizadas más por los productores que por los propios directores –ay, Jon Amiel, qué fue de “Copycat” o “La trampa”, dos productos comerciales, pero honestos y bien hechos…-, buscando exclusivamente crear otra franquicia comercial y una atracción en un determinado parque temático.


Federico Casado Reina



©2001. AndaluNet, Diseño y hospedaje de páginas Web