Ficha película

Título:
Las reglas del juego
Director:
Roger Avary
Intérpretes:
: James Van Der Beek, Shannyn Sossamon, Jessica Biel, Ian Somerhalder, Kate Bosworth
Calificación:
Crítica

Tanto cinefilia y tanto videoclub tenía que notarse. Para comprender mejor esta pelicula, hay que remotarse hace unos quince o veinte años, tiempos en los que Quentin Tarantino y Roger Avary compartían la trastienda del videoclub donde trabajaban y soñaban con el cine, un cine originado tras deglutir indiscriminadamente neorrealismo italiano y expresionismo alemán, películas “manga” japonesas y spaghetti-western, clásicos de gángsters de los cuarenta y videoclips de la MTV; tras regurgitar y mezclarlo todo, ambos personajes han creado una nueva estética no solamente en la factura de sus películas –siempre rompedora- sino también en sus argumentos, todos ellos de una insólita frescura dentro del cine. Sus dos colaboraciones cinematográficas –“Reservoir Dogs”, en la que Avary era la “voz” del locutor que unía los fragmentos del film y coguionista, y “Pulp Fiction”, también coescribiendo con Tarantino ese estimulante experimento fílmico- han supuesto un auténtico revulsivo en la industria y por eso parece lógico que la cruel, ácida y descreida mirada que tiene el escritor más problemático de la literatura contemporánea norteamericana, Bret Easton Ellis –autor de “American Psycho”-, sea el elegido para la siguiente película de Avary, tras el relativo fracaso de su debut como realizador en “Killing Zoe”.
Aunque ya sabíamos que la juventud tiene un alto componente de hedonismo, y que en la sociedad norteamericana hay dos caras bien diferenciadas –una la que se ve, conservadora, y racional y la otra la descerebrada, hedonista, corrupta y viciosa-, Avary se encarga en el film de hacernos explotar en las narices el planteamiento del delirio adolescente, como una especie de poseso frenesí en el que el sexo, las drogas y la violencia son los únicos motores, y al que sobrevive, se le supone una adaptación al medio natural superior a la media. La novela de Ellis contiene sin duda esa reflexión pesimista de la maldad humana, que aunque tiene momentos de cierta esperanza hacia “lo bueno” como entelequia, termina avocada al egoísmo personal irremisiblemente. En esta especie de crónica negra, los personajes son estudiantes universitarios cuyo único objetivo es la felicidad, buscada por los medios más diversos, desde la droga a la dependencia emocional o el sexo. Lo verdaderamente original del film es el juego que el director realiza con un montaje muy atrevido, utilizando recursos estilísticos francamente originales –como la cámara rápida, el montaje inverso o el “split-screen” (pantalla partida)- para obtener un resultado acertado. El único problema en el cómputo general, es que la duración se llega a estirar demasiado, con un pequeño bache narrativo hacia el final del segundo acto, algo que lamentablemente es bastante común en el cine norteamericano. De todas las formas, es una propuesta muy original y rompedora, que se ríe inhumanamente –como Easton Ellis- de la condición humana y del voraz e inconsciente hedonismo de buena parte de la adolescencia norteamericana.


Federico Casado Reina



©2001. AndaluNet, Diseño y hospedaje de páginas Web